LA LLEGADA DE LA PRIMAVERA.
El almendro es un árbol perenne de la
familia de las rosáceas de hasta 10 metros de altura. Tallos erectos de corteza
oscura y agrietada. Hojas puntiagudas, óvalo lanceoladas, de contorno dentado.
Flores agrupadas normalmente en parejas, de color blanco rosadas, rosado, o más
raramente blanco. Frutos en drupa con el mesocarpo inicialmente blando pero que
se va endureciendo a medida que madura. Semilla comestible. El origen del
cultivo de la almendra se localiza en Asia, en una zona bastante amplia de
Oriente Próximo, desde el mar Egeo hasta la meseta de Pamir, comprendiendo
Mesopotamia, Irán, Tukestán y Kurdistán. De la zona del actual Cercano Oriente,
en la que se inició su cultivo, siguió el mismo camino que otros muchos
alimentos; llegó a Grecia y a Roma, y los romanos las difundieron ampliamente
por el resto de Europa, desde donde llegaron hasta América. Actualmente los
principales productores de almendras son Estados Unidos y España, seguidos de
Portugal e Italia.
La almendra tiene su origen en las zonas
templadas y desérticas del oeste de Asia, desde donde fue extendiéndose
gradualmente hacia las regiones cálidas y secas de la cuenca mediterránea. Es
conocida como la reina de las rosas, en la Edad Media los sirvientes la
incluían en los banquetes de los reyes para favorecer su digestión y, así, su
indulgencia.
El almendro es una especie frutal
típicamente mediterránea. Se clasifica botánicamente dentro de la familia de
las rosáceas, género Prunus y subgénero Amygdalus. El almendro es un árbol muy
robusto y de larga vida, que en la cuenca mediterránea puede vivir entre 60 y
80 años, incluso hasta un siglo. Es, junto al olivo, uno de los principales
árboles cultivados con fin industrial en el litoral mediterráneo. Ambos
presentan análogas exigencias climáticas, temperaturas medias entre 15 y 18ºC,
inviernos suaves y veranos calurosos y unas lluvias que no suelen superar los
600 mm. Es una especie relativamente poco exigente respecto a la calidad de los
terrenos en que se asienta. La época más indicada para la plantación del
almendro es la de reposo o vegetación, que tiene lugar entre los meses de
octubre y enero, siendo el mes de noviembre el más apropiado.
El almendro es uno de los primeros árboles
en florecer. Su floración, que constituye todo un espectáculo anuncia
normalmente el final del invierno y el comienzo de la primavera. En las zonas
templadas de España la floración tiene lugar desde diciembre hasta el mes de
febrero, algunas variedades en marzo. La duración de las flores suele ser de
quince días. El peor enemigo del almendro y de sus flores son las heladas
tardías, que se producen desde finales de enero.
Comentarios